Una escapada en invierno a la naturaleza de este país europeo está más que justificada, aunque uno no vaya a esquiar, y es que la gastronomía rica y contundente de Andorra, su patrimonio histórico y sus aguas termales, bien merecen una visita… Sin embargo, en el artículo de hoy, vamos a dejar a un lado todo eso y vamos a descubrirte 4 actividades invernales imprescindibles para realizar en tu próxima visita al País de los Pirineos sin tener que calzarte unos esquís y, así, disfrutar también de sus paisajes invernales. ¿Nos acompañas?
¿Quieres sentirte como un auténtico esquimal? Ve a la estación de esquí de Grandvalira y construye un iglú con tus propias manos. ¡Te lo pasarás en grande!
Con ayuda de los monitores y, según el estado de la nieve, podrás levantar un iglú de compactación o de bloques mientras aprendes acerca de la vida de los esquimales y las características especiales de sus viviendas. Una vez terminado el trabajo, podrás adentrarte en su interior y experimentar una sensación térmica única…
Puedes reservar esta actividad a través de Civitatis en el enlace que encontrarás más abajo.
¿Quieres explorar los parajes del Pirineo de una forma diferente? Ve, de nuevo, a la estación de esquí de Grandvalira, cálzate las raquetas y hazte con unos bastones… ¡Que comience la aventura!
Acompañado de monitores, podrás recorrer el Valle del Bosc de Moretó atravesando los bosques nevados de pino negro durante unas 2 horas…
Puedes reservar esta actividad a través de Civitatis en el enlace que encontrarás más abajo.
¿Te atreves a conducir por los parajes nevados de Andorra? Entonces, súbete a una moto de nieve en la estación de esquí de Grandvalira… ¡No olvidarás la experiencia!
Acompañado de un monitor, podrás conducir tu propia moto de nieve a través de los bosques de pino negro pirenaico realizando giros, tomando curvas y acelerando a tope…
Puedes reservar esta actividad a través de Civitatis en el enlace que encontrarás más abajo.
¿Quieres vivir una experiencia única? Acércate a la estación de esquí de Grandvalira y monta en un trineo tirado por perros… ¡Te sentirás como un auténtico esquimal!
Con la ayuda de un guía y de los maravillosos canes, podrás realizar un recorrido de unos 2 Km a través de caminos nevados y teniendo los frondosos bosques como protagonistas…
Puedes reservar esta actividad a través de Civitatis en el enlace que encontrarás a continuación.