Si eres de esos a los que les encanta viajar, como a nosotros, seguro que te encanta invertir esos días que tienes libres en un viaje, pero probablemente más de una vez te haya costado elegir un destino y es que ¡hay tantos lugares por descubrir! A menudo es muy difícil decidirse entre, por ejemplo: disfrutar de la playa o de la montaña, recorrer cada rincón de una ciudad, combinar varios destinos, hacer un crucero o realizar una ruta por carretera... Por otra parte, como hay infinidad de formas de viajar puede ser todo un agobio encontrar un destino que, además de llamar nuestra atención, se adapte a nuestro presupuesto y se pueda disfrutar convenientemente en los días de que disponemos.
Por eso, para evitar frustrarnos y perder el tiempo en exceso, nosotros siempre seguimos el mismo procedimiento para escoger nuestros próximos destinos:
Paso 1 - Buscar inspiración y hacer una lista con posibles opciones
Bueno algo de tiempo hay que perder en descubrir destinos que nos llamen la atención, ¿no? Para nosotros cualquier forma es buena para encontrar inspiración: hablar con otros viajeros, ver programas de viajes o, una de nuestras favoritas, consultar blogs de viajes, como el nuestro jeje... Y es que cualquiera de estas opciones puede darte buenas ideas.
Luego, siempre es buena idea apuntar aquellos que os llamen la atención y no descartar nada a priori. Lo que a lo mejor no te sirva ahora, puede servirte en otra ocasión... Tampoco descartes lugares que ya hayas visitado, probablemente puedas encontrar atractivos nuevos que descubrir...
Paso 2 - Hacer balance
Una vez tengas la lista, debes analizar los pros y los contras de cada uno. Para ello, ten en cuenta aspectos tales como si es buena época para viajar allí, qué hay para ver o hacer y considerar si te faltarían o sobrarían días... Así podrás considerar cuál/es te convienen más para esos días en concreto.
Paso 3 - Presupuesto estimativo
Finalmente, y no por ello menos importante, echa cuentas y haz un presupuesto estimativo para ver si alguno de los destinos es viable, es decir, que se adapte a tu bolsillo... Tampoco te cierres en banda pues, aunque muchos lo crean, viajar no es sólo para ricos y, a veces, con poco dinero se puede descubrir mucho.